
La trayectoria del Real Zaragoza (porque así se dice) desde su descenso de 2013 ha sido un cúmulo de desgracias disfrazadas de diferentes formas. La más reciente le llegó en forma de gol en el tiempo añadido de Pape Diamanka, un futbolista que ellos mismos habían fichado sin resultado pocos años atrás. Por deseo de venganza, o por lo que fuera, el senegalés impidió su participación en la final de la promoción de ascenso y abrió una nueva crisis dentro del club maño. El técnico de aquel equipo era Natxo González, que desde hace poco menos de un mes ya no es entrenador del Deportivo. Goles de antiguos jugadores aparte, no es la primera vez que el Real Zaragoza coquetea con un descenso a Segunda B que le haría rozar la desaparición. Quizás la de esta temporada sea más dura todavía, porque viene de estar a dos partidos y un descuento de la vuelta a Primera División que ansían desde hace ya seis temporadas. Una etapa en la que han probaron todo tipo de fórmulas para recuperar el estatus perdido del club, ninguna con éxito.
Confianza en la cantera
Desde el anterior curso la apuesta es claramente de cantera, seguramente por obligaciones del guion, pero la factoría del Deportivo Aragón ha nutrido al primer equipo de algunos jugadores que suenan para equipos de la categoría de oro a pesar de la mala temporada de su colectivo. Hombres como Dani Lasure o Julián Delmás no son estrellas mundiales, pero sí han logrado ser habituales en los laterales, y en el medio del campo ya han roto la puerta jóvenes talentosos como Pep Biel y Raúl Guti. Carlos Nieto, además, cumple tanto en el lateral como en el centro de la defensa. Jorge Pombo fue otro de los jugadores insignia del Real Zaragoza de Natxo González, y aunque este no es su mejor año en cuanto a rendimiento siempre lleva peligro. Por otra parte, Alberto Soro y sus 20 años recién cumplidos ya reciben llamadas de clubes de Primera.
Por suerte para José Luís Martí, la participación de Soro en el partido del sábado es una quimera por culpa de un esguince de tobillo. De todas maneras, el Real Zaragoza afrontará esta prueba con un extra de moral fruto de su incontestable victoria en Córdoba (0-3), con hat trick de un Marc Gual que ante el Dépor intentará volver a golear.
El exdeportivista Víctor Fernández busca detener el baile de entrenadores
El Deportivo visitará La Romareda en partido de liga por primera vez en cinco años (ya lo hizo esta temporada en Copa del Rey), en un choque que significará también el reencuentro con el adivino de su “autodestrucción”: Víctor Fernández, uno de los responsables de las grandes gestas del Real Zaragoza que ahora afronta la misión de estabilizar de una vez por todas al club. Es el tercer entrenador del club en lo que va de temporada, tras suceder a Imanol Idiakez y Lucas Alcaraz, y el undécimo desde la consumación del descenso que lo hundió. A Idiakez y Alcaraz se le suman Paco Herrera, Víctor Muñoz, Ranko Popović, Lluís Carreras, Luis Milla, Raül Agné, César Láinez y el propio Natxo González. El efecto de Víctor Fernández hasta el momento es positivo, aunque no todo lo que desde Zaragoza habrían deseado. El veterano técnico cogió al equipo en la jornada 19 y a solo dos puntos del descenso. Actualmente lo tiene a siete de distancia.
REAL ZARAGOZA 18-19 ( HASTA JORNADA 36)
- PUESTO/PUNTOS: 14º, 44 puntos.
- PARTIDOS GANADOS/EMPATADOS PERDIDOS: 11/11/14.
- GOLES A FAVOR: 41.
- GOLES EN CONTRA: 44.
- MÁXIMO GOLEADOR: Álvaro Vázquez (8 goles).
- ÚLTIMO RESULTADO: Córdoba 0-3 Real Zaragoza (Marc Gual x3).
