Malas noticias para Carlos Fernández y el Deportivo. El delantero sevillano, protagonista hace tan solo una semana por su reincorporación total a la dinámica normal del equipo, sufrió en el entrenamiento de ayer lunes una rotura de fibras en el bíceps femoral de su pierna izquierda que le mantendrá alejado de los campos de fútbol durante un mínimo de otras cuatro semanas. Es la tercera recaída de esta lesión. El club comunicó de primeras que su retirada prematura de la sesión de preparación obedecía a “precaución”, pero las pruebas posteriores confirmaron la peor de las noticias.
Esta novedad de la enfermería no podía llegar en peor momento. Carlos se lesionó el 2 de diciembre en Majadahonda, repareció el 6 de enero contra el Lugo y en la jornada siguiente el mismo día del partido contra el Mallorca el club informó que había recaído de su lesión. Volvió el 27 de enero en Gijón, pero solo jugó 24 minutos, que además completó con una notable cojera. El fin de semana pasado regresó a una convocatoria, pero Natxo González optó por reservarlo en La Rosaleda. Ahora el drama de recaídas vuelve al punto de partida.
El comunicado íntegro del club es el siguiente:
Carlos Fernández sufrió el pasado lunes 25 de febrero un cuadro de dolor en la cara posterior de su muslo izquierdo durante en el entrenamiento, por lo que se retiró antes que el resto por precaución, hasta comprobar el alcance de la posible lesión.
El estudio de resonancia magnética efectuado por los Servicios Médicos del RC Deportivo confirma la recidiva de la lesión muscular grado 2 que sufrió en el bíceps femoral izquierdo, por lo que permanecerá en reposo deportivo hasta que su situación permita iniciar el programa de readaptación, paso previo a su regreso a los entrenamientos de grupo.
